Todo empezó el año pasado, y cuanto ha pasado. Uffff, comencé a usar twitter por curioso. Realmente no sabia como y para que se usaba, pero en fin, la cuenta ya estaba creada e inicie una nueva vida. La 2.0.
Este entusiasmo por lo desconocido duro no mas que dos días. Si, por suerte lo abandone a los dos días de empezar. No lo entendí, me parecía aburrido y los pocos famosos que seguía no aportaban nada. De todas maneras como todo se recicla, mi idea sobre twitter también lo hizo, y una mañana volví.
En mi regreso, continué buscando famosos a seguir, aquellos que antes los veía en la Tv, los escuchaba por la Radio o simplemente me gustaba su forma de ser y admiraba. Hasta que descubrí algo: En Twitter los famosos no brillan en la alfombra roja ni sonríen con dentaduras impecables. En Twitter los famosos apren.dn,a….usar,ls.signosde puntuacin,,,, se van "urjente para el ensallo", ¡¡¡¡¡ponen doscientos signos de admiración en cada frase!!!!!, o usn abrevsions d cel adolesent.
Twitter pone en evidencia que ese periodista destacado el cual te parecia altamente inteligente, en la vida real escribe "desepcion" "buena honda" "relog". Que esa actriz que hizo muchísimas películas se la pasa mirando y opinando sobre Tinelli y el culo de sus vedettes. Que la animadora infantil de tu infancia dice imbecilidades todo el día, cita a Osho, y retwittea los halagos que le dejan para que los vean todos sus seguidores.
Se los digo gente, seguir a una estrella en Twitter es una desilusión enorme que fulmina los recuerdos más cholulos de nuestra infancia. Seguir famosos en Twitter es mala idea. Es como ver a Norma Aleandro sacándose los dientes postizos o Victor Hugo Moralez puteando a diestra y siniestra.
Ustedes eligen.
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