martes, 19 de abril de 2011

Saber valorar las pequeñas cosas ante todo


Infinidades de veces me suspendo a pensar porque realmente tenemos que sufrir tanto y no reír mas.

Si bien es la pura realidad y una "necesidad" que, cuando llegamos al mundo como bebes tenemos que ser palmeados para sacar el resto del liquido amniótico de nuestros pulmones y sufrimos, también es cierto que estuvimos refujiados en ese cofre precioso, el utero materno, lejos de la violencia, aislado de las peleas, gritos, injusticia e inseguridad y disfrutamos. Aunque sea necesario hacerlo, no tenemos que dejar de reconocer que los primeros minutos después del nacer se llora y se sufre.

Gran parte del dia se habla de cosas negativas, se leen algunas tantas desgracias, ya sea en la TV o leyendo algun diario de noticias que nos causan daño de alguna forma. Sin embargo, siempre, al menos para quien les escribe, cuando algo pasa voy con mi memoria a evocar momentos donde reinaba la mayor armonia posible, y alimento mi "yo" interno para que sea mas liviana la "carga emocional" que se produce. Tenemos mucho por que sufrir pero tambien hay tanto porque estar agradecidos y "felices".

La opcion  mas validera es detenerse y meditar, en las pequeñas cosas que tenemos y que si le damos el valor real, lo mas probable es que caigamos en la cuenta que son grandes y no todos las tienen.

Siempre nos parece que somos los unicos a quien nos pasan momentos desagradables, pero cuando escuchamos a otros, ahi se nos hace la luz y notamos que hay gente con problemas mayores e incluso sin la posibilidad de resorverlos.

El solo hecho de tener un techo donde albergarnos, una familia (aunque no sea "perfecta"), amigos con quien compartir todo (buenos y malos momentos), poder ver, caminar, hablar y en mi caso poderles escribir y compartir con ustedes esto, son cosas que no todos las tiene a su alcance.

Los hospitales, clinicas, pensiones y refugios estan llenos de enfermos, muchos de los cuales poseen enfermendades incurables o no, pero quizaz cuando logren recuperarse no tengan a donde ir, ni nadie que los contenga.

En la actualidad, hay niños carenciados, hay tantas desgracias mundiales, tantas guerras, tantas catatrofes naturales y aunque no sea el mejor gobierno, vivimos en democracia, somos libres de expresarnos, tenemos un pais rico en todo sentido. Mientras que en otros continentes hay personas que estan padeciendo hambre dia a dia y muriendo por pestes .

Así puedo continuar y seguir pero, como dicen "solo basta con un ejemplo claro para satisfacer la duda". Intentemos, decir cosas positivas, Y ESTO NO ES NEGAR LO MALO,  ¡No! porque seria mentirnos, pero embebernos en todo lo positivo que nos rodea para que forme una suerte de coraza para ponerle el pecho a los días no tan buenos es la mejor opcion. Si esto logra implementarse en un ejercicio diario lo mas probable es que dejemos de quejarnos tanto y comenzamos a sonreír.

Practiquemos intentar gozar las pequeñas cosas que hacen a las grandes. Aprendamos a conjugar el verbo AGRADECER y apliquemos mas la palabra ALEGRÍA aunque mas no sea para empezar el día. 

¡Al menos intentemoslo, realmente vale la pena! 

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